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Lo mejor de lo nuestro

Talara al ritmo llanero, boricua y caribeño

Escribe Miguel Godos

Según el censo de 1876, la población sumada de la caleta  y la  hacienda de Talara, era de  22 habitantes. El 14  de noviembre  de  1908,  se crea  el distrito  de Máncora, con su capital Talara. Ambas localidades se desmembraron de la Provincia Litoral de Paita. En 1956, tras un  explosivo crecimiento  demográfico producto de la actividad petrolera, Talara  se convierte en provincia, tomando como distritos a Pariñas, El Alto, La Brea, Lobitos, Máncora y Los Órganos

Entre los años 1930,  1940  y  1950, paralelamente a la bonanza petrolera, se produce un interesante movimiento musical. Talara se había distribuido en parques, cada parque incluía 20 casas. Talara  contaba ya  con servicio  de agua, luz,  desagüe y  gas mediante  conexiones  domiciliarias cuando Piura, la capital, aún no tenía los suministros resueltos. Su aeropuerto tenía cubiertas las rutas Talara – Panamá y Talara – Nueva York con una genuina vocación cosmopolita.

En 1938, en este escenario de  envidiable comodidad apareció el grupo musical “La Sonora Costanera”. Según refiere el diario La Industria, del 25 de abril de 1925, da cuenta en sus columnas sociales del arribo de un contingente comandado por el inglés Jack Philleas  al  puerto  de  Paita,  integrado  por  ciudadanos  de  Caracas, Barquisimeto y Mérida (Venezuela), además de ciudadanos de La Perla y Bayamón (Puerto Rico), y Santiago de Cuba y La Habana (Cuba)  quienes  compartirían su experiencia con los petroleros peruanos.

No hay duda que con los petroleros llaneros, caribeños y boricuas llegó a Talara su música y su cultura. Las páginas de los diarios mencionan  la celebración de grandes fiestas y celebraciones  en Navidad, Fiestas Patrias, Año Nuevo, Día de la Madre y los tradicionales Carnavales acompañados de la incomparable música que movía el continente. Se mencionan  ya al Club Inglés de Talara, el Club Nacional de Lobitos y los Clubes Liberal y  La Esmeralda de Colán, en Paita.

Los diarios de la época: La Industria, El Regional, La Voz del  Norte  y  El  Tiempo,  dan cuenta  de  Almuerzos-Danzants y kermesses, amenizados  por  “competentes  orquestas” de Puerto Rico y Cuba. Un estudio antropológico de Fernando Ríos Correa titulado “Entre  congas y algarrobos: Una aproximación al estudio de la cumbia peruana” da cuenta de esta singular y original  influencia cultural.

La  Talara se divertía con el repertorio de la Sonora Matancera, Pérez Prado, Daniel Santos. Se baila mambo y guaguancó.  En 1936 el oficio de músico era cotizado muy bien en Talara.

En 1938 aparecen  la  Orquesta  de  los  hermanos  Tiza  y  Sonora Costanera conformada  por  músicos cubanos y venezolanos dirigidos por piuranos. La población con recursos económicos estaba pendiente de lo repertorios de  –polkas  y  valses-  el son de la  guajira,el  bolero,  la guaracha,  foxtrot,  charleston,  lindy  hop, tango,  jazz  y  una  variante  de  blues  conocida  como  boogie-woogie-.

Mientras en Piura brillaban Los Cuyuscos y Los Tacaleños con valses y tonderos de compositores locales, Talara tenía música exótica de ágiles movimientos. En 1943, el músico trujillano afincado en Piura, Wilfredo Obando Vásquez  autor de la música del himno del Colegio San Miguel de Piura dirigía en Talara la Orquesta Obando y en Piura la Orquesta Sinfónica Municipal. Lo que obtenía como paga mensual en el San Miguel de Piura lo podía obtener una noche en Talara. En 1948 existían con contratos asegurados todo el año la Sonora Costanera, la Orquesta Aguilar dirigida por un venezolano, la Orquesta Obando y la Orquesta Rumba Bana.

En 1949, Raúl  Mendoza  Sifuentes, un apasionado músico aficionado,  fundó la orquesta Rockys Band  en Negritos. Mendoza, obrero petrolero, compartía sus momentos libres  con sus pares cubanos diestros en la trompeta y la guitarra que interpretaban danzones y música tradicional. Este itinerario de aprendizaje musical finalmente desembocó en el Jazz y el Blue que también se ejecutaban en los momentos libres.

Cuando no se interpretaba música se la escuchaba en discos de carbón de 72 revoluciones interpretados en  Pick-ups. La inédita influencia musical es visible en el conjunto Los Melódicos integrado por cuatro músicos: dos cubanos, un panameño y un peruano. Los instrumentos utilizados en los conjuntos orquestales eran trompetas, un saxofón tenor, dos saxofones altos, dos trombones, un contrabajo, un piano, maracas y claves, congas, tumbadora, timbales, que también eran reemplazados por batería de rock and roll.

En 1951 deslumbran en el escenario las orquestas Oswaldo y Studio 9 -Talara que se mantuvieron hasta 1970. Poco después apareció  TLB –Talara. En 1970 se fundó la Orquesta “Miel de Abeja” en Talara. La música fue un ingrediente y lubricante social de la integración familiar en Talara. Según recuerda el doctor Ronnie Moscol Mogollón, había celebraciones con orquesta para grandes y chicos, para mayores y también para jóvenes. Según recuerda, los pequeños tenían su propio repertorio en el ritmo contagioso del twist. Los mayores disfrutaban de la música caribeña y boricua a la vuelta de la esquina. Hoy Ricardo Danelly y Su Tropicana del Swing han retomado esta edad de oro del esplendor musical que siempre acompañó a Talara.