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Talara eligió a su Gran Maestra Provincial de Artesanía

“Gracias, Dios, por darme la vida, la familia y los recursos marinos cada mañana”. Esa es la rápida pero sentida oración que hace Elvira Sánchez Sócola cuando debe volar para dictar clases a mujeres que sueñan con hacer artesanía y bisutería en base a caracoles, conchas, escamas y otros insumos que el mar talareño generosamente arroja a las playas.

La señora Elvira está celebrando el haber obtenido el título de Gran Maestro Provincial de Artesanía, que cada dos años da la comuna talareña en la semana de su aniversario. Lo hace con humildad y pensando en que todo comenzó cuando, a los nueve años, recibió en la Casita del Saber de PETROPERÚ, las primeras clases en artesanía marina. 

Desde ese momento, muy de mañana, aprovechando la marea baja, recoge los mejores caracoles en Las Peñitas, caracolillos y percebe en Lobitos, conchas nácar en Cabo Blanco y demás insumos en Máncora, Los Órganos y Negritos. Y en base a ese material comienza a hacer sus maravillas.

Para lograr el título de Gran Maestro Provincial de Artesanía 2018, por ejemplo, venciendo a otros doce artesanos talareños, presentó arreglos diseñados con flores de escamas, caracoles y conchas y escamas. Pero también incluyó tallas de pescadores en base “palos de mar”, aquellas maderas de embarcaciones marinas que el mar deforma (o forma).

 

Doña Elvira tiene otra gran satisfacción: enseñar. Hace poco fue profesora y tutora de las animadas señoras de Talara que iniciaron un curso de artesanía y bisutería marina gracias a PETROPERÚ. “Es importantísima la transmisión de conocimientos para que se consolide una nueva generación de artesanas en Talara”, explica.

Mientras hace la maleta con insumos marinos talareños porque debe partir en estos días a varias ciudades norteñas en exposiciones y cursos se anima, a través de Talara, mi orgullo, a dar el siguiente mensaje: “Valoremos lo que tenemos en Talara. Hay muchos recursos desperdiciados. Solos hay que decidirse a trabajarlos. No tengan miedo. Cuando caemos lo hacemos para adelante. Y seguimos”, dice con fe y a sus 55 primaveras.